La pandemia por COVID-19 en 2020 exigió tomar medidas restrictivas de la circulación de personas para contener la propagación del virus, lo que impactó de manera muy significativa en las actividades sociales vinculadas a la cultura y el entretenimiento. Con la presencialidad limitada por las disposiciones nacionales, las prácticas culturales se trasladaron, en muchos casos, al ámbito de internet y los consumos digitales. Producto de las restricciones, la asistencia al cine, al teatro y a museos se vio interrumpida de cuajo, mientras que las actividades ligadas a la televisión y los consumos digitales mostraron crecimientos evidentes, sobre todo en el segundo trimestre de 2020, cuando la circulación de personas estaba muy limitada.
EN 2020 los cines recibieron 8.931.508 espectadores (un 82% menos que en 2019) y la recaudación total por venta de entradas fue de $1.950 millones de pesos (cayó un 83% con respecto a 2019 en valores reales). Naturalmente, la concurrencia a las salas se concentró en el primer trimestre del año, previo al ASPO[1] (aislamiento social, preventivo y obligatorio).
El ranking de las diez películas más taquilleras mantuvo la misma tendencia de los últimos años: figura solo una película de origen nacional, El robo del siglo (este año en segundo lugar), y el film más visto, Frozen 2, pertenece al rubro infantil.
En 2020 se estrenaron 72 películas (44 extranjeras y 28 nacionales), un 85% menos que en 2019. El 24% de las entradas vendidas corresponden a películas nacionales y el 76%, a películas extranjeras.
Los estrenos nacionales (28) mostraron una caída del 89% con relación a la producción de 2019, representaron el 39% del total de estrenos en el país (15 puntos menos que en 2019) y convocaron un 47% menos de espectadores que en 2019. El largometraje nacional más visto durante 2020, El robo del siglo, concentró el 95% de los espectadores de películas nacionales.
La cantidad total de títulos editados en formato físico y digital verificó un incremento del 1,2%: pasó de 27.371 títulos en 2019 a 27.694 en 2020. Esta suba se explica por el crecimiento del soporte digital, ya que la cantidad de títulos editados en soporte físico cayó un 18%.
En 2020 la cantidad de ejemplares impresos en formato físico se contrajo un 28% con respecto al año anterior, con lo que se verifica una continuidad decreciente desde 2014 y un récord de caída histórica.
La circulación neta de diarios pagos creció un 12% con respecto a 2019. La mejora viene de la mano de los dos diarios de mayor circulación, fundamentalmente en su versión digital, lo que redunda en una hiperconcentración del consumo en los diarios de mayor circulación (los dos primeros reúnen el 68% del mercado).
Según la información relevada por la Asociación Argentina de Empresarios Teatrales, la asistencia a los espectáculos musicales cayó un 86% en 2020 y la cantidad de funciones, un 82%. Lógicamente, la merma de espectadores y funciones se explica por la suspensión de actividades dispuesta por el ASPO a partir del mes de marzo, parcialmente levantada en los últimos dos meses del año.
Con respecto al año anterior, en 2020[2] la asistencia total a las salas de teatro cayó un 82% (-78% en el circuito comercial y -96% en el público) y la cantidad de funciones, un 79% (-76% en el circuito comercial y -92% en el público).
Durante 2020 el Instituto Nacional del Teatro mantuvo sus líneas regulares de fomento e incorporó líneas adicionales para sostener el sector durante la pandemia: otorgó 524 subsidios regulares a grupos y elencos teatrales y 2.073 subsidios adicionales a través del Plan Podestá, implementado en contexto Covid-19 (alcanzando ambas modalidades un total de 2.597 subsidios). En total, estas ayudas representaron un 258% más que las concedidas en 2019.
Además, el organismo otorgó 267 subsidios para salas y espacios teatrales dentro de la línea regular y 1.172 subsidios adicionales en el marco del Plan Podestá (un total de 1.439 subsidios, un 473% más que en 2019).
La asistencia a museos, como todas las actividades presenciales en 2020, se concentró en los tres primeros meses del año, antes de decretarse el ASPO. En 2020 los museos públicos nacionales y de CABA recibieron 527.216 visitas (un 84% menos que en 2019). Los museos más concurridos fueron el Museo Histórico Nacional del Cabildo y de la Revolución de Mayo, y el Museo Nacional de Bellas Artes.
El consumo de TV en la Argentina se caracteriza por la alta penetración del mercado por suscripción, que está compuesto por la TV por cable y la TV satelital. La TV por cable, con mayor penetración, explica el 76% de los accesos y el 66% de los ingresos.
En los últimos seis años, se observa una tendencia creciente de los accesos a servicios de TV por cable y una cada vez menor demanda del servicio satelital, que alcanzó en 2020 su marca más baja.
En ambos segmentos se produjo una caída de la recaudación en pesos constantes durante 2020 (-4% TV por cable y -7% TV satelital).
Descargá el informe
[1] Las mediciones de 2020 corresponden a los primeros tres meses del año, es decir, antes del cierre de salas dispuesto por el ASPO.
[2] En Argentina el 12 de marzo de 2020 se anunciaron las primeras medidas cancelando proyecciones de cine, recitales y cualquier evento con concurrencia mayor a 200 personas. Las clases se suspendieron a partir del 16 de marzo mientras que la cuarentena total se anunció el 19 de marzo.